La dermatología se encuentra entre las especialidades más demandadas actualmente, con una tasa de derivación desde atención primaria en torno al 10,1-10,9%. Por un lado, debido al aumento de la esperanza de vida de la población, que además sufre patologías más crónicas, y por otro, debido a un crecimiento de las consultas por motivos banales que no representan realmente una enfermedad, provocando un retraso en la atención médica especializada de las patologías de mayor gravedad. Debido a esta situación, muchos servicios de dermatología se han visto obligados a evaluar y modificar sus circuitos asistenciales con la intención de optimizar los recursos disponibles. En este sentido, el progreso científico-tecnológico de la medicina, que ha experimentado un continuo y acelerado desarrollo, se ha materializado en el desarrollo de la telemedicina y en nuestro caso, la teledermatología. Esta consiste en el uso de tecnologías de la información y la comunicación para la práctica de la disciplina de la dermatología, y España ha sido uno de los países que ha liderado su desarrollo a nivel internacional. Nuestro estudio se circunscribió en el Departamento de Salud Valencia-Doctor Peset y el objeto de análisis fueron las interconsultas preferentes remitidas desde atención primaria al servicio de dermatología mediante un circuito de teledermatología, entre junio de 2015 y junio de 2016. El objetivo fue realizar un triaje de las mismas, para priorizar la asistencia de aquellos pacientes con lesiones de mayor gravedad. Se obtuvieron 1.526 interconsultas preferentes. El 75% fueron respondidas por teledermatología en menos de 1 día laborable. El 68,5% se mantuvieron como preferentes mientras que en el 31,5% de casos la prioridad se modificó a ordinaria. El 90,5% de interconsultas obtuvieron una cita presencial dentro del tiempo de espera objetivo. El 35,5% de IC fueron seleccionadas por los teledermatólogos como potencialmente evitables, porcentaje que descendió al 30,6% una vez descartadas aquellas en las que no hubo un acuerdo diagnóstico completo. El acuerdo diagnóstico completo se alcanzó en el 70,9% de interconsultas, mientras que el acuerdo agregado se alcanzó en una proporción mayor (80,6%). La probabilidad de concordancia de los teledermatólogos se vio influenciada, en mayor medida, por la calidad de las fotografías recibidas y el número de diagnósticos diferenciales emitidos. En el 14,8% de interconsultas analizadas se detectó una lesión de forma casual durante la visita presencial, siendo tumores malignos una minoría de casos (17,4%). Los pacientes, los médicos de atención primaria y los dermatólogos que participaron en el circuito de teledermatología mostraron unos porcentajes de satisfacción global elevados. El estudio mostró que la teledermatología fue fiable para el triaje de interconsultas preferentes de atención primaria y permitió priorizar la asistencia de forma efectiva y con porcentajes de satisfacción elevados entre los usuarios.